“Y no hay remedio”, terminaba resignado
Guamán Poma de Ayala sus crónicas sobre el Perú durante la Colonia. Sin llegar ni de lejos a su altura, escribí
hace 26 años el libro –Réquiem por Perú mi Patria– en la que llegaba a la misma conclusión, http://www.herbertmorote.com/requiem2004.asp
Sobre este libro Bryce Echenique,
entonces amigo y después plagiario (¡hay que ver cómo está el patio en
el Perú!) escribió: “debería ser lectura
obligatoria no solo para todos los peruanos sino también para todos aquellos
que pretensan penetrar sin anteojeras ni tapujos en la mil y una
manifestaciones de la realidad peruana”.
Hay
muchas razones para pervivencia de la tragedia peruana, una de ellas es la
mordaza, adormilamiento y manipulación que ejercen sobre su población los
medios de comunicación y aquellos a los que con méritos o sin ellos concitan la
atención inmerecida de la gente.
El
último ejemplo de nuestra podredumbre es la forzada renuncia del presidente
Pedro Pablo Kuczynski después de que, ¡uff, ¡sorpresa!, ¡sorpresa!, testimonios
de la firma Odebrecht y otras empresas declarasen le pagaban mordidas.
¿Es
que acaso nadie sabía que PPK era un filibustero capitalista que usaba las
puertas giratorias del gobierno para enriquecerse? Si yo, que no vivo de forma
permanente en el Perú desde 1971, vengo denunciando sus dolosas prácticas desde
hace ya casi 20 años[1].
Por favor… si era bien conocido su talante lobista de alto vuelo. ¿Es que no
hay periodismo de investigación en el Perú? Si era cuestión de rasgar un poco
en su currículo, en los trabajos que realizó, en sus empresas. ¿Es que nadie
dio importancia que se asoció con el presidente de México Salinas de Gortari
causando la mayor bancarrota en la historia de América Latina? Hombre, si salió
hasta en el Herald Tribune[2].
Pero nada, los neoliberales, como Vargas Llosa lo apoyaron. Claro, se podrán
disculpar ahora, la alternativa era la hija de Fujimori. Es verdad, pero había
otra alternativa, el voto en blanco y llamar a nuevas elecciones. Pero los que
propusimos eso perdimos por mucho.
Lo
más curioso de nuestra putrefacción es que quien finalmente logró que PPK renunciase
fue la hija de Fujimori quien dio a conocer videos en que su hermano Kenji
compraba votos para la permanencia de PPK. ¡Por Dios, hasta dónde hemos
llegado!. Ya bien decía Manuel González Prada “el Perú es un cuerpo al que por donde lo toques sale pus”.
“Y no
hay remedio”
O
sí….