FALSO BICENTENARIO DE LA INDEPENDENCIA DEL PERÚ
Herbert Morote
En estos días se hace inevitable una reflexión sobre la coincidencia de los festejos del Bicentenario de la Independencia del Perú con su presente situación política donde por fin sale a la luz de manera exponencial el enfrentamiento entre los marginados pobladores de la sierra y otras provincias y ese Perú conservador mayormente capitalino.
La primera cuestión que se presenta es si la falsedad de la fecha de la independencia que festejamos no es acaso el reflejo de toda esa patraña limeña que ha sabido perpetuarse hasta nuestros días. En efecto, festejamos la proclama de la independencia del Perú el 28 de julio de 1821 por San Martín: “El Perú es desde este momento libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende” cuando esta declaración no fue ni la primera proclama de la independencia hecha por San Martín ni el Perú era libre en ese momento.
Veamos: si nos conformamos con creer que una simple proclama dio la libertad al Perú deberíamos festejar el evento ocurrido antes, el 27 de noviembre de 1820, cuando San Martín proclamó la independencia del Perú desde un balcón de la ciudad costeña de Huara. Pero no, Huara es un pueblito, no se puede comparar con Lima, por lo tanto esa declaración no importa y Lima se apropia del evento. Pero hay más, la declaración de Huara fue ante el pueblo, en la de Lima el pueblo no fue convocado. La declaración la hizo San Martín ante los notables del Cabildo, que es como se llamaba entonces a la Municipalidad. Y eso no es todo, en ese momento el Perú estaba lejos de ser libre. Salvo Lima y algún otro pueblo costeño, el resto del país, comenzando por el Callao y llegando hasta la frontera con Argentina, estaba en manos de los realistas.
El balcón de Huara
La verdadera y única independencia del Perú se realizó en 9 de diciembre de 1824, cuando el ejército español firmó su rendición luego de ser derrotados en la batalla de Ayacucho. Pero no, el centralismo limeño no podía ceder tan evidente honor a Ayacucho, y sin ninguna oposición todavía seguimos celebrando el 28 de julio de 1821 como inicio de nuestra independencia con fiestas, desfiles, discursos, reseñas históricas.
Firma de la capitulación de España en Ayacucho.
9 de diciembre de 1824
Y no es cuestión de fechas, es cuestión de justicia, de ética, y también de esa discriminación que se ha asentado en nuestro país a tal punto que consideramos tan normal que se celebre como cierta la falsa declaración de independencia realizada en Lima, como anormal que un serrano como Pedro Castillo pretenda ser presidente del Perú.
Una vuelta de tuerca: ¿a nadie sorprende que en la agenda oficial de festivos del Perú no aparezca un día para rememorar a Tupac Amaru el principal precursor de la independencia de los pueblos andinos?
Quizá ha llegado el momento. ¿O es mucho pedir?
Julio de 2021
HM
BORRACHO
ResponderEliminarInteresante análisis. La independencia del Perú en Lima no era seguro,pues los colonialistas aún vivían en Lima y el ejército de ellos se había internado a la sierra centro y sur. San Martin lo sabía.
ResponderEliminarAsi es.Ka historia la han escrito los poderosos.y responden a sus intereses..Cuando los hijos del pueblo escriban la historia tendremos la verdad!
ResponderEliminarMuy cierto .. .miente miente ..que quedo 28 de julio día del Perú
ResponderEliminarEn efecto, siempre el centralismo limeño ha tratado de hacer suyos, actos importantes.Considero importante la información vertida, la misma que deberá de propalarse para conocimiento de todos los peruanos.
ResponderEliminarEl "pueblito" o distrito se llama Huaura, y a la vez la provincia toma el mismo nombre. Es lamentable que tamaña omisión desdibuje la observación que debería ingresar a un publico debate.
ResponderEliminarEs muy lamentable que el centralismo de Lima se haya sobrepuesto sobre las otras regiones o pueblos del Perú profundo que sí tuvieron participación activa en el proceso de la independencia del Perú. Por ello, El bicentenario debe ser motivo de una profunda reflexión y repensar sí debemos cambiar ese pensamiento imperante
ResponderEliminarEs Huaura y no como edcruben Huara
ResponderEliminarHUAURA y no Huara
ResponderEliminarA ver, desde la escuela me enseñaron que la proclama se hizo en el balcón de Huaura, pero si te gusta la exactitud deberías haber mencionado que primero se hizo en SUPE, en su plaza de armas y luego se dicidió llevar la proclama a Huaura ya que el hermoso balcón se acomodaba mejor al acontecimiento. Por otro lado es curioso ver el tinte de resentimiento. Ya tuvimos un presidente serrano que fue Toledo. No creo q el asunto sea q PC sea serrano sino q es simplemente impresentable para semejante cargo, pero esa es otra historia.
ResponderEliminarNo me interesaría que el presidente sea de Marte, siempre y cuando estuviera preparado para por lo menos no hacernos daño.
ResponderEliminarY Castillo no es que sea impresentable por su procedencia, pues hemos tenido presidentes provincianos antes, como Sánchez Cerro, Odría, Belaúnde, Velasco Alvarado, Toledo, Humala y Vizcarra. Provincianos todos y de todos los colores.
No. Castillo es impresentable porque es atrevido en tanto ignorante. Nada más y nada menos.
Al comentario de César, arriba: Humala y Belaúnde no son provincianos, son de Lima. Humala, mediocre y corrupto, con graves acusaciones por violaciones a los ddhh cuando dirigía el cuartel Madre Mía, c. 1992. Y Belaúnde, unos de los políticos más despreciables que ha parido esta pseudo-nación, el mayor genocida de la historia peruana entre 1980 y 1985...(y luego la caviarada imbécil acusa de "genocida" al Chino, jajaja). Eso, sin negar los crímenes AISLADOS del fujimorismo.
ResponderEliminarHay gente que está "esperanzada" por el gobierno del profe Castillo, pero aún me estoy preguntando qué de bueno puede salir de un partido lleno de izquierdistas radicales, miembros de Sendero Luminoso, corruptos como Cerrón, oportunistas como Mendoza, etc. Dentro de unos días vamos a comprobar quién era realmente el mal menor.
Nemesio Chopaca Porongo.
United States of America